Cap铆tulo 91: Recibiendo nalgadas

     



Cap铆tulo 91: Recibiendo nalgadas

⚠️ Advertencia de Contenido ⚠️

Este cap铆tulo contiene temas delicados que pueden no ser aptos para todos los lectores. Por favor, tenga discreci贸n.

Los contenidos incluyen:

Conflictos en una relaci贸n de pareja con din谩mica de poder desigual.

Lenguaje y acciones de maltrato/abuso emocional (aislamiento, manipulaci贸n, amenazas, gaslighting).

Violencia f铆sica leve con connotaci贸n disciplinaria (nalgadas no consensuales).

Se recomienda discreci贸n al leer.

El contenido no es muy fuerte, pero he considerado prudente colocar esta advertencia para los lectores que puedan sentirse inc贸modos con la representaci贸n de este tipo de comportamientos en las relaciones, a pesar de que quien ha llegado hasta aqu铆 ya est谩 m谩s o menos familiarizado con la narrativa del autor y el tono general de la obra.

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Jian Xiao sostuvo los pies fr铆os de Yibao, frot谩ndolos con las palmas y respirando sobre ellos. Al sentir que le sub铆a la temperatura, lo rega帽贸: 

"¿Por qu茅 no te pusiste calcetines y pantuflas?".

Yibao segu铆a agraviado. Era evidente que su esposo lo ignoraba deliberadamente esa tarde. Al verlo comer arroz, no le recogi贸 verduras y lo ignor贸 sin hablarle. Yibao casi pens贸 que su relaci贸n hab铆a terminado.

Yibao solo quer铆a que Jian Xiao fuera un poco m谩s moderado en sus comportamiento excesivos del pasado, no que enfriara por completo esta relaci贸n.

Yibao todav铆a estaba un poco enojado y silenciosamente sac贸 su pie de la mano de Jian Xiao.

Jian Xiao agarr贸 nuevamente sus peque帽os pies y los abraz贸 con fuerza: 

"A煤n no se han calentado".

Yibao es un zombi y no tiene temperatura corporal. Suele depender de la temperatura corporal de Jian Xiao para mantenerse caliente. Tan pronto como se separaba de Jian Xiao, el "horno natural", su temperatura corporal descend铆a r谩pidamente.

Yibao intent贸 sacar su pie nuevamente, y esta vez Jian Xiao frunci贸 el ce帽o con disgusto y amenaz贸 directamente: 

"¿Quieres que te d茅 una nalgada?"

Yibao se qued贸 en silencio, agarrando su manga, sinti茅ndose a煤n m谩s agraviado. Poco despu茅s, las l谩grimas cayeron sobre la s谩bana, extendi茅ndose poco a poco.

Jian Xiao solt贸 los pies de Yibao y la abraz贸: 

"Cari帽o, cuando me rechazaste, ¿alguna vez pensaste en lo triste que me sent铆?"

"Wuwu... No..." 

Yibao nunca ha rechazado a Jian Xiao.

Jian Xiao era demasiado autoritario y no toleraba ninguna objeci贸n.

Yibao solo quer铆a que Jian Xiao no fuera tan excesivo, que fuera solo un poco excesivo estar铆a bien, pero Jian Xiao simplemente se negaba a hacerlo.

Yibao estaba muy triste. Pensaba que solo era una mascota obediente para Jian Xiao. Si una mascota se atrev铆a a confrontar a su due帽o, este le daba una lecci贸n sin piedad. As铆 lo trataba Jian Xiao.

Yibao baj贸 la cabeza y estall贸 en l谩grimas: 

"Wuwu... No me amas..."

Jian Xiao estaba tan enojado que se ri贸: 

"¿Qu茅 prueba que no te amo?"

Yibao sollozaba y dec铆a intermitentemente: "Pegarme..."

"¿Acaso te he pegado ya?". 

Aunque Jian Xiao lo golpeara, solo le tocar铆a el trasero dos veces. Tiene mucha carne ah铆, as铆 que no le doler谩 despu茅s de dos golpes. Si fuera en otra parte, Jian Xiao no estar铆a dispuesto a golpearlo.

A煤n no ha sucedido, pero eso no significa que no suceder谩 m谩s adelante.

A Yibao no le gust贸 el m茅todo educativo de Jian Xiao, por lo que luch贸 por escapar y quiso dormir solo en la habitaci贸n de al lado.

Jian Xiao trajo al hombre de regreso y lo presion贸 contra la cama: 

"Eres tan desobediente, ¿de verdad crees que no te golpear茅?"

Yibao se sinti贸 muy agraviado y abri贸 la boca para morder, pero al pensar que a煤n portaba el virus, no pudo soportarlo. Solo pudo morderse los labios con agravio y mir贸 a Jian Xiao con l谩grimas en los ojos.

Jian Xiao de repente mordi贸 la boquita de Yi Bao. Despu茅s de mimarla un poco, pregunt贸:

"¿Vas a ser obediente?"

Yibao apart贸 la mirada. Todav铆a estaba triste por haber sido ignorado esa tarde. No quer铆a hacer las paces y solo quer铆a ir a la habitaci贸n de al lado para calmarse un rato.

Jian Xiao frunci贸 a煤n m谩s el ce帽o e inmediatamente volte贸 a Yibao.

Hizo que Yibao se acostara boca abajo sobre sus rodillas, y le dio una palmada suave y no muy fuerte en su trasero respingon. Aunque la palmada no fue fuerte, el sonido fue muy fuerte y n铆tido a trav茅s de la fina tela.

Yibao yac铆a inm贸vil sobre las piernas de Jian Xiao, con las l谩grimas a煤n cayendo.

Al ver a Yibao llorar en silencio, Jian Xiao no soport贸 seguir sermone谩ndola. Se inclin贸 y bes贸 las l谩grimas de Yibao: 

"Cari帽o, s茅 que a煤n eres joven y no entiendes los sentimientos".

Yibao se mordi贸 el dorso de la mano con agravio: 

"Ya no soy un ni帽o..."

Por muy joven que fuera, ya era un adolescente de m谩s de diez a帽os. A esa edad, no pod铆a ser tan ingenuo.

"Pero ni siquiera sabes que te amo." 

Jian Xiao pens贸 que hab铆a expresado su amor con suficiente claridad, pero Yibao a煤n no pod铆a verlo e incluso dijo que no lo amaba.

Yibao se sinti贸 muy afligido, pero no pudo decir nada. Escondi贸 la cara entre los brazos y llor贸 hasta que se le pusieron rojas las orejas.

Jian Xiao se negaba a admitir que hab铆a hecho algo malo. Culpaba constantemente a Yibao e incluso golpeaba a su esposa. Un hombre como 茅l no merece tener esposa.

"Beb茅..." llam贸 Jian Xiao.

Yibao no respondi贸 ni reaccion贸 en absoluto.

Jian Xiao llam贸 de nuevo, pero todav铆a no obtuvo respuesta.

Jian Xiao estaba un poco asustado. Yibao no entend铆a qu茅 era el amor. Si se peleaban as铆 y romp铆a la relaci贸n con 茅l por completo, no habr铆a forma de convencerlo de que volviera.

Despu茅s de un punto muerto, Jian Xiao, algo inusual en 茅l, dijo suavemente:

"Cari帽o, lo siento, me equivoqu茅".

Yibao todav铆a lo ignor贸.

Jian Xiao puso su mano sobre el peque帽o trasero que acababa de azotar: 

"¿Te duele aqu铆? D茅jame frot谩rtelo".

Yibao hizo pucheros y sus ojos estaban rojos.

"¿Todav铆a te duele? D茅jame besarte entonces." 

Tras decir eso, Jian Xiao estaba a punto de bajar la cabeza para besarte.

Yibao quiso extender la mano para detenerlo, pero no lo logr贸.

Jian Xiao ya la hab铆a besado varias veces. Hab铆a rastros de golpes en su piel blanca, y ahora tambi茅n hab铆a rastros de besos de Jian Xiao.

Yibao estaba tan avergonzado que enterr贸 su cabeza en la almohada, eligiendo evitarlo y dejando que Jian Xiao hiciera lo que quisiera.

Jian Xiao bes贸 a Yibao durante un largo rato y sigui贸 pregunt谩ndole si todav铆a le dol铆a.

Yibao estaba demasiado avergonzado para responder, por lo que simplemente baj贸 la cabeza y guard贸 silencio.

Jian Xiao no dejaba de besarla as铆, y el sonido de los besos resonaba en la habitaci贸n. Si alguien no supiera, pensar铆a que estaba usando ventosas.

"No... ay... no..." 

Yibao finalmente logr贸 pronunciar esas dos palabras, pero Jian Xiao no se detuvo al o铆rlas.

Yibao se arrastr贸 hacia adelante para intentar evitarlo, pero no lo logr贸.

En ese momento, el hombre gordo llam贸 a la puerta de afuera:

 "Maestro Jian, ¿est谩n todos bien?"

El hombre gordo fue arrastrado por Li Hun para llamar a la puerta.

Li Hun vio a Jian Xiao y Xiaobao discutiendo por la tarde, as铆 que le preocup贸 un poco que Xiaobao fuera acosado por la noche, as铆 que arrastr贸 al gordo y a Lei Zi para que echaran un vistazo. Escucharon un sonido de ventosas desde afuera de la puerta y se preguntaron qu茅 estar铆a pasando adentro.

Lei Zi pregunt贸:

"¿Est谩n usando ventosas?"

El Gordo y Li Hun lo miraron simult谩neamente. Usar ventosas a medianoche era una locura.

No hubo respuesta desde adentro, por lo que Li Hun continu贸 pidi茅ndole al hombre gordo que llamara a la puerta.

El hombre gordo sinti贸 que estaba en un gran problema y no se atrevi贸 a seguir llamando: 

"Yo... no me atrevo... Hermano Hun, ¿por qu茅 no lo haces t煤 mismo?"

Li Hun apart贸 al hombre gordo y le dio una patada: 

"Xiaobao, ¿est谩s bien? ¿Jian Xiao te intimid贸? Tu t铆o est谩 aqu铆 para salvarte".

Al escuchar la voz de su t铆o, Yibao r谩pidamente se subi贸 los pantalones y se encogi贸 en la colcha, sin atreverse a mostrar la cabeza nuevamente.

Jian Xiao abri贸 la puerta con una cara oscura y mir贸 al agresivo Li Hun afuera: 

"Yibao est谩 bien, no necesitas preocuparte".

"¿No te enojaste con Xiaobao esta tarde? Si ya no lo quieres, devu茅lvemelo. No soporto ver c贸mo intimidas a Xiaobao". 

Como t铆o de Yibao, Li Hun debe hacer todo lo posible por protegerlo y no permitir que Yibao sufra ning煤n agravio.

Jian Xiao tambi茅n se estaba impacientando: 

"Te dije que Yibao est谩 bien".

Li Hun ignor贸 sus excusas e insisti贸 en entrar a echar un vistazo.

Yibao, que estaba escondido debajo de la colcha, escuch贸 la pelea, levant贸 la cabeza de debajo de la colcha para echar un vistazo y luego susurr贸: 

"T铆o, estoy bien".

La garganta de Yibao estaba tan ronca que se notaba que algo andaba mal. Era imposible que no pasara nada. Li Hun se exalt贸 a煤n m谩s y agarr贸 a Jian Xiao del cuello, listo para pelear.

Li Hun es casi de la misma altura que Jian Xiao. Ya hab铆an luchado antes. En ese entonces, Li Hun a煤n era un zombi inconsciente de alto nivel con gran poder de combate. Sin embargo, ahora ya no pod铆a vencer a Jian Xiao.

Jian Xiao se hab铆a inyectado varias dosis de agente de fortalecimiento en el laboratorio de la Base Jingsheng. Esto no solo reforzaba sus habilidades, sino que tambi茅n lo ayudaba a desarrollar otras, aunque este agente a煤n estaba en fase experimental y no era del todo exitoso, por lo que los efectos no se hab铆an manifestado por completo.  

Pero Jian Xiao es m谩s que capaz de derrotar a Li Hun.

Al ver que realmente iban a pelear, el Gordo y Leizi se apresuraron a separarlos, uno agarrando a cada uno.

"Maestro Jian, no se comporte as铆. Al fin y al cabo, es el t铆o de Yibao. Si lo golpea, Yibao se enojar谩 con usted. No valdr谩 la pena"

Jian Xiao se calm贸. Por el bien de Yibao, realmente no deber铆a pelear.

Para entonces, Yibao ya se hab铆a levantado de la cama. Si peleaban, los detendr铆a de inmediato.

Li Hun todav铆a no estaba tranquilo, se acerc贸 e intent贸 agarrar el cuello de Jian Xiao, pero el hombre gordo lo detuvo.

Yibao se acerc贸 y consol贸 a Li Hun: 

"T铆o, no me est谩n intimidando".

Li Hun se neg贸 a escuchar y dijo: 

"¿No te trat贸 con indiferencia esta tarde? Xiao Bao, no necesitas un hombre as铆. Estoy seguro de que encontrar谩s a alguien mejor. en el futuro".

Jian Xiao dijo enojado: 

"¡Te atreves!".

Los dos estaban a punto de pelearse de nuevo. Yibao estaba en medio y no sab铆a a qui茅n convencer. Parec铆a que no ten铆a voz ni voto en ninguno de los dos bandos.

Li Hun intent贸 llevarse a Xiao Bao fuera de la habitaci贸n.

Sin embargo, Jian Xiao dio el primer paso y sostuvo a Yibao en sus brazos.

Yibao levant贸 el pu帽o y golpe贸 a Jian Xiao en el pecho varias veces: 

"No te pelees con mi t铆o".

Jian Xiao todav铆a se sent铆a agraviado: 

"脡l es el que siempre me causa problemas, cari帽o, ¿A qui茅n apoyas? ¿A 茅l o a m铆?"

Yibao definitivamente se pondr谩 del lado de Jian Xiao, ya que es su esposo, pero no puede permitir que su t铆o sufra ninguna p茅rdida.

Yibao dijo con desconfianza: 

"Haz las paces con mi t铆o, no discutan m谩s, de lo contrario... no dormir茅 contigo..."

Yibao sinti贸 que su amenaza no tuvo ning煤n efecto en Jian Xiao, y despu茅s de decirlo, quiso cambiar sus palabras.

Pero inesperadamente, despu茅s de decir eso, Jian Xiao inmediatamente cedi贸 ante Li Hun.

Li Hun no insisti贸 m谩s  en el asunto y 茅l, Leizi y el gordo regresaron a sus respectivas habitaciones a dormir.

Yibao tambi茅n quiso ir a la habitaci贸n de al lado a dormir solo.

Jian Xiao lo detuvo y dijo: 

"¿No dijiste que si nos reconcili谩bamos, dormir谩s conmigo?"

"No me amas, me golpeaste". 

Yibao apart贸 su mano y estaba a punto de ir a la habitaci贸n de al lado, nadie pod铆a detenerlo.


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