Cap铆tulo 61: ¿No es suficiente comer carne hasta saciarte?
Sus pensamientos hab铆an sido descifrados, as铆 que ya no hab铆a necesidad de ocultarlos. Jian Xiao le pregunt贸 a Tang Rui con franqueza:
"¿Aunque est茅 demasiado lleno no pasa nada?".
Jian Xiao siempre sent铆a que la barriga de Yibao se romper铆a al comer carne. Daba mucho miedo verla tan hinchada. Sent铆a que su delgada barriga estaba a punto de reventar. Sospechaba que lo hab铆a alimentado demasiado, pero no ten铆a otra manera de evitarlo.
Tang Rui guard贸 silencio: "..."
Sent铆a que Jian Xiao le estaba presumiendo de manera encubierta "su tama帽o", y por un momento ni siquiera quiso responderle.
Finalmente, respondi贸 de mala gana con dos palabras:
"Est谩 bien".
En ese momento, Aobao volvi贸 a inquietarse, retorci茅ndose en sus brazos, con ganas de jugar. Tang Rui sac贸 una ranita de pl谩stico de su bolsillo para que Aobao jugara con ella. ¿Qui茅n habr铆a pensado que un hombre tan grande y fuerte como 茅l llevar铆a una ranita de juguete en el bolsillo? Este contraste era demasiado sorprendente.
Aobao se qued贸 en silencio tras recibir el juguete. Yibao se帽al贸 el peque帽o juguete. Cuando Jian Xiao comprendi贸, tambi茅n sac贸 un peque帽o dispositivo del espacio.
Yibao se apoy贸 en los brazos de Jian Xiao con satisfacci贸n, jugando con el peque帽o aparato con cuidado.
Jian Xiao todav铆a le estaba pidiendo consejos a Tang Rui sobre c贸mo criar un zombi.
La respuesta de Tang Rui fue que los zombies tienen que comer carne humana. Los zombis deben comer carne humana para mantenerse "vivos", un ejemplo de esto es que los ojos de su Aobao se opacaban si no com铆a carne humana.
Pero Jian Xiao dijo que su Yibao estaba bien y que esa situaci贸n no hab铆a ocurrido. Adem谩s, nunca usaba carne humana para alimentarlo (excepto la suya propia). Solo usaba bocadillos y n煤cleos de cristal. Si Yibao quer铆a comer carne humana, pod铆a alimentarlo, pero a Yibao no le interesaba mucho. De lo contrario, ¿c贸mo podr铆a el chico gordo sentarse junto a ellos y escucharlos hablar sin sufrir da帽o alguno? Hac铆a mucho que se lo habr铆an comido, convirti茅ndolo en un chico delgado.
(Nota: Aunque Jian Xiao afirma que esa situaci贸n que describe Tan Rui no hab铆a ocurrido, cap铆tulos anteriores muestran que Yibao s铆 puede decaer si no consume sangre o carne, sucedi茅ndole lo mismo que a Aobao. En el Cap铆tulo 28 los ojos de Yibao pierden brillo, y este se vuelve m谩s ap谩tico y "apagado". Finalmente, Jian Xiao le dio de sangre y Yibao se recuper贸 de inmediato. Tras este acontecimiento, Jian Xiao concluy贸 que, y lo cito, "los zombis a煤n ten铆an que beber sangre y comer carne".
Tras aquel episodio, Jian Xiao lo aliment贸 varias veces con su sangre en otros cap铆tulos, y con muchos n煤cleos cristalinos en cap铆tulos m谩s recientes, por lo que la situaci贸n no volvi贸 a repetirse. Para Jian Xiao, esto equivale a que "Yi Bao no necesita carne humana" como los dem谩s zombis, pero puede resultar un poco confuso que diga que dicha situaci贸n no ha ocurrido antes, as铆 que vi necesario aclarar este punto. Disculpen si mis notas interfieren con la lectura.)
Gracias a su conversaci贸n, Jian Xiao pudo hacerse una idea aproximada del car谩cter de Tang Rui. Sabiendo que no ten铆a segundas intenciones, estaba ansioso por acompa帽arlos en su viaje.
"¿Ad贸nde van? Puedo llevarlos".
La respuesta de Tang Rui fue simple:
"No planeo ir a ning煤n lado. Solo quiero mantener a Aobao vivo y sano".
Vivir bien en los 煤ltimos tiempos es el mayor lujo.
Al ver los brazos de Tang Rui, cubierto de cicatrices antiguas, Jian Xiao comprendi贸 que aquel hombre hab铆a pasado por muchas batallas. Aobao, en cambio, ten铆a la piel blanca y limpia, claramente protegido por 茅l. No era f谩cil para estos dos depender el uno del otro en el apocalipsis, por lo que Jian Xiao decidi贸 tenderles una mano:
"¿Quieren ir a la zona segura?"
"Aobao es un zombi. Es f谩cil descubrirlo si entra en la zona segura. Adem谩s, los humanos no son amables con nosotros".
Tang Rui baj贸 la cabeza al decir esto y acarici贸 la cabeza de Aobao con cari帽o.
Tang Rui no ten铆a estatus ni respaldo; as铆 que, por supuesto, la mayor铆a de las personas que hab铆a encontrado eran malas. Jian Xiao, en cambio, ten铆a la identidad de "joven maestro Jian", rodeado de gente que buscaba complacerlo. La naturaleza humana es relativa. No existe el bien absoluto ni el mal absoluto. Era un tema muy complejo.
Xiao Niao, que estaba de pie junto a ellos, perdi贸 su humor juguet贸n. La sonrisa se le desvaneci贸 al decir:
"El hermano Rui tiene raz贸n. Nadie en la raza humana es bueno. Todos son tan oscuros y repugnantes en el fondo. Deber铆an convertirse en zombis y el mundo deber铆a ser destruido. El apocalipsis se acerca porque los humanos lo merecen".
El hombre gordo sinti贸 que la ni帽a daba un poco de miedo, pero tambi茅n sab铆a que deb铆an haber pasado por mucho para tener esos pensamientos ahora, as铆 que no pudo evitar sentir compasi贸n:
"Maestro Jian, ¿les damos algo de comida para llevar? De todas formas, hay bastante en la parte trasera del cami贸n".
Jian Xiao no se neg贸:
"Hablemos de ello ma帽ana por la ma帽ana".
Al caer la noche, Jian Xiao abraz贸 a Yibao y durmi贸 en el asiento del conductor del cami贸n, recostado de lado, ocupando tanto el asiento del conductor como el del copiloto. Los dem谩s hicieron camas improvisadas afuera.
Tang Rui cubri贸 a Aobao con la 煤nica manta, mientras Xiao Niao y el gordo se acurrucaron juntos para mantenerse calientes.
Xiao Niao se acurruc贸 bajo una fina manta y le dijo al hombre gordo con mal humor:
"Jian Xiao y el hermano Rui son buenos hombres, al menos mejores que cualquier otro que haya conocido. Aunque tienen malos pensamientos, es innegable que su amor es genuino. A diferencia de algunos hip贸critas y canallas".
"¿Has descubierto qu茅 pensamientos sucios tiene el Sr. Jian?"
El hombre gordo sent铆a mucha curiosidad por lo que pensaba el Sr. Jian, pues cuanto m谩s supiera sobre 茅l, mejor podr铆a adularlo despu茅s.
"Lo tiene todo escrito en la cara, y a煤n no lo ves."
Xiao Niao no entend铆a c贸mo este "perrito faldero" no pod铆a leer las expresiones de su propio amo.
En los ojos del hombre gordo, el t铆o Jian siempre lo miraba con frialdad. ¿Qu茅 m谩s pod铆a ver? Lo 煤nico que ve铆a era si el t铆o Jian estaba de buen o mal humor, nada m谩s.
"Vamos, dime. Al fin y al cabo, no se puede juzgar a una persona por su apariencia"
El hombre gordo ten铆a muchas ganas de saber qu茅 pensaba el Sr. Jian, e incluso habl贸 con un tono coqueto.
Xiao Niao lo mir贸 con escalofr铆os y luego extendi贸 una mano:
"Dame un dulce y te lo dir茅".
Cosas como el az煤car pertenecen a Yibao, y el Gordito jam谩s las tendr铆a. Incluso si las tuviera, se las entregar铆a honestamente a Jian Xiao, quien a su vez se las dar铆a a Yibao.
"¿Puede ser otro tipo de comida?"
El hombre gordo podr铆a subir al cami贸n y tomar a escondidas un trozo de carne encurtida.
Xiao Niao acept贸 a rega帽adientes y luego le cont贸 al gordo lo que Jian Xiao estaba pensando:
"Tu Maestro Jian planea probar una nueva posici贸n esta noche, y tambi茅n quiere hacer eso otro... De todos modos, tiene un gusto bastante fuerte, ni siquiera el hermano Rui tiene un gusto tan fuerte".
Cuanto m谩s vaga al respecto era Xiao Niao, m谩s curioso se volv铆a el hombre gordo:
"¿Qu茅 es "eso otro"?"
¿A qu茅 se refer铆a con tener un sabor tan fuerte? El hombre gordo sent铆a tanta curiosidad que le picaba el coraz贸n, y deseaba tener el don de leer la mente al igual que Xiao Niao.
Xiao Niao lo mantuvo en secreto deliberadamente:
"No puedo decirlo, est谩 m谩s all谩 de la capacidad de aceptaci贸n de la gente normal".
El hombre gordo se frot贸 las manos y dijo:
"No me trates como a una persona normal. Simplemente habla con valent铆a y confianza".
Xiao Niao neg贸 con la cabeza:
"Realmente no puedo dec铆rtelo, me censurar谩n si lo hago".
"Entonces sus煤rramelo solo a m铆. Como mucho, puedo darte otra libra de arroz, un pescado salado y una bolsa de hojas de mostaza encurtidas".
Para facilitar el almacenamiento, el cami贸n estaba lleno de encurtidos o productos secos, y no hab铆a nada m谩s que ofrecer.
Al ver que realmente quer铆a saber, Xiao Niao pregunt贸 indirectamente:
"Dime una cosa... ¿Yibao puede "producir leche de Wangzai"? Porque escuch茅 claramente que tu Se帽or Jian tiene muchas ganas de probar el sabor de esa... cosa. No lo puedo decir directamente, t煤 entiendes."
Ahora que las cosas han llegado a este punto, ¿c贸mo es posible que el hombre gordo no lo entienda? Sin embargo, no le dio importancia, porque lo que Yibao estaba bebiendo era el Wangzai original. Aunque nunca lo hab铆a probado, lo not贸 por el olor. Simplemente no esperaba que el Sr. Jian realmente quisiera probarlo.
El hombre gordo volvi贸 a preguntar:
"¿El Maestro Jian lo ha probado alguna vez?"
Xiao Niao se toc贸 la barbilla con el dedo y dijo:
"Creo que lo prob贸 en secreto. No estoy segura porque las voces en su mente estaban demasiado mezcladas. Su mente est谩 llena de pensamientos ca贸ticos, es dif铆cil escucharlos todos con claridad".
La curiosidad del hombre gordo se despert贸 por completo:
"Entonces esfu茅rzate m谩s y escucha con m谩s atenci贸n".
Xiao Niao se burl贸 con desprecio:
"Los humanos son as铆, no tienen l铆mites. No me gusta escuchar esas voces sucias".
Por eso Xiao Niao no quiere estar con humanos. Son demasiado sucios. Solo le gustan los chicos ingenuos y guapos como Yibao y Aobao. De verdad quiere secuestrarlos a ambos.
El hombre gordo pregunt贸:
"Entonces, ¿crees que mi coraz贸n no est谩 sucio?"
Xiao Niao lo mir贸 y dijo:
"Est谩s muy sucio".
Gordito: "..."
El hombre gordo no albergaba pensamientos sucios del tipo lujurioso. Solo pensaba en c贸mo aferrarse a Jian Xiao, su muslo dorado, y c贸mo sobrevivir al apocalipsis.
Xiao Niao tuvo una buena impresi贸n del hombre gordo y no pudo evitar charlar con 茅l un rato m谩s.
El hombre gordo solo se interesaba por los asuntos del Sr. Jian porque ten铆a que complacer a su padre rico. As铆 que, incluso lo llam贸 "pap谩" directamente:
"¿Qu茅 piensa mi pap谩 Jian de m铆?".
Xiao Niao resopl贸:
"Solo tiene a Yibao en su coraz贸n. No hay lugar para ti. Ni siquiera lo he escuchado pensar en ti como alguien que tenga un lugar en su coraz贸n".
El gordo: "...Oh, oh, oh, soy un hijo tan filial, pero ni siquiera puedo obtener el reconocimiento de mi padre".
Esto es realmente algo triste.
Xiao Niao le dio unas palmaditas en la cabeza para consolarlo:
"Tranquilo, no parece tenerte en mala estima. Seguramente no te abandonar谩."
Estas palabras hicieron que el hombre gordo se sintiera mucho mejor, y sinti贸 que la ni帽a cansada del mundo frente a 茅l era bastante linda.
El hombre gordo rob贸 a escondidas unas bolsas de fideos instant谩neos del carruaje, los tritur贸, les a帽adi贸 un poco de sal, los agit贸 uniformemente y se los sirvi贸 en la palma de la mano para comerlos. El sabor tambi茅n era incre铆ble.
Yibao a煤n no se hab铆a dormido. Al o铆r a alguien comiendo fideos instant谩neos, se despert贸 a煤n m谩s. Incluso dej贸 de comer la carne de Jian Xiao. Se levant贸 de repente, peg贸 su carita a la ventanilla del coche y mir贸 fijamente a las dos personas que com铆an fideos abajo:
"¡Ayyyyyyyyyyyyyyyyyy!". Yibao tambi茅n quer铆a comer.
Jian Xiao apart贸 a Yibao y le dijo:
"Cari帽o, est谩s comiendo carne, pero sigues pensando en otras comidas. ¿Crees que no te estoy alimentando lo suficiente?"
La carita de Yibao desapareci贸 de la ventanilla del coche. Las dos personas que estaban abajo no se dieron cuenta de lo que acababa de pasar. Simplemente sintieron que la parte delantera del cami贸n temblaba con demasiada fuerza y se preguntaron si se producir铆a un terremoto.
Ao Bao y Tang Rui tambi茅n estaban despiertos. El gordo estaba a punto de compartir la comida con ellos, pero Xiao Niao lo detuvo y dijo:
"No los molestes. Son como tu Maestro Jian, inquietos".
El hombre gordo dijo "oh" y luego convers贸 con Xiao Niao mientras com铆a fideos instant谩neos.
El hombre gordo dijo que tuvo mucha suerte de haber conocido a Jian Xiao. Ahora ya no tiene que preocuparse por la comida ni la ropa. Mientras el t铆o Jian no se porte mal y regrese sano y salvo a la base de Jingsheng, podr谩 vivir en paz. Pero el t铆o Jian solo tiene que portarse bien e ir a buscar a ese m茅dico.
El hombre gordo s贸lo esperaba que el doctor ya estuviera muerto, pero no pod铆a explicar por qu茅.
El hombre gordo quer铆a pedirle a Xiao Niao que se uniera a ellos, pero Xiao Niao se neg贸:
"No, tengo que seguir al hermano Rui y a Ao Bao. Tal vez podamos volver a encontrarnos en el futuro".
"¿De verdad podremos volver a encontrarnos?"
En el vasto apocalipsis, nadie puede decirlo con certeza.
Nota de Traductor:
Me enter茅 de que ha comenzado una nueva purga en la plataforma. Han estado eliminando muchas novelas y tambi茅n han eliminado muchas cuentas. As铆 que por si acaso he hecho un respaldo de cada cap铆tulo que he traducido. Tambi茅n estoy creando una p谩gina para albergar la traducci贸n de esta novela y otras que planeo traducir en pr贸ximamente. 馃槉
Esta nota fue publicada en Wattpad junto a la publicaci贸n del Cap铆tulo 61. As铆 que si est谩s leyendo esto aqu铆, ¡Bienvenido a mi p谩gina!

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